Brexit, ¿qué puede pasar?
El Brexit -como se conoce a la posible salida de Reino Unido de la Unión Europea- fue el tema central del último Consejo Europeo, celebrado el 18 y 19 de febrero. Tras dos días de negociaciones, se alcanzó un acuerdo que, en líneas generales, cumple con las exigencias de Reino Unido.
En un reciente informe, BBVA Research considera que este acuerdo “debilita el impulso de integración europea pero no es un paso atrás drástico”. El referéndum en el que los británicos votarán a favor o en contra de su separación de la UE, convocado para el 23 de junio, estará muy reñido.
BBVA Research afirma que, tal como se esperaba, el acuerdo alcanzado con el resto de Europa permite al primer ministro británico, David Cameron, defender el voto a favor de la permanencia. Sin embargo, los euroescépticos británicos podrían verlo como un acuerdo de mínimos. Por lo tanto, el riesgo de Brexit sigue siendo importante.
Estas son 3 claves para entender el Brexit que se desprenden del informe de BBVA Research
1. ¿Quieren los británicos abandonar la Unión Europea? En Reino Unido, los sondeos apuntan a una pequeña ventaja de la opción de permanencia. La mayoría de los miembros del gobierno, las grandes empresas y otros tres grandes partidos (laboristas, liberales y el Partido Nacionalista Escocés) defienden la opción de permanecer en la UE. Por otro lado, muchos diputados conservadores apoyan la salida. Por ejemplo, el apoyo al Brexit del alcalde de Londres, Boris Johnson, del partido conservador y probable candidato a primer ministro en las próximas elecciones, podría arrastrar consigo una gran cantidad de votos. En definitiva, BBVA Research considera probable que la opción de permanencia en la UE gane en el referéndum por muy poco margen, como ocurre habitualmente con los referendos relacionados con asuntos de la UE; se debatirá probablemente en torno a asuntos más amplios que los que se han abordado en el acuerdo del Consejo Europeo, como las ventajas económicas de permanecer en la UE o, a nivel más general, los argumentos culturales o los sentimientos de apego o desapego hacia Europa.
2. ¿Cuál es la postura del resto de Europa? Durante las negociaciones del Consejo Europeo, Bélgica y Francia pidieron que el acuerdo incluyera una "cláusula de autodestrucción", es decir, que en caso de que ganen los votos del Brexit, no haya renegociación posible. En teoría, esto debería evitar que los votantes opten estratégicamente a favor de la salida con la esperanza de lograr después un acuerdo más favorable. Sin embargo, el borrador final de esa cláusula es ambiguo con respecto a esa cuestión y no parece descartar de forma explícita un segundo referéndum. David Cameron ha advertido a los británicos de que si gana el abandono de la UE en el referéndum, la decisión sería definitiva. Sin embargo, desde la campaña a favor de la salida de la UE se sigue argumentando que los votos a favor de separarse podrían usarse como estrategia para conseguir más concesiones para Reino Unido por parte de Europa.Desde la campaña a favor de salir de la UE, se sigue creyendo que sus propios votos pueden ser una palanca para presionar a la UE a hacer más concesiones a Reino Unido. Desoyen así las advertencias del primer ministro David Cameron de que no habrá marcha atrás.
3. ¿Qué consecuencias tendría el Brexit para Reino Unido? ¿Y para el resto de Europa? El Brexit con llevaría importantes costes para el Reino Unido que se materializarían en una menor confianza, nuevas negociaciones de acuerdos comerciales con la UE que serían muy costosas y prolongadas, la exclusión inicial del Tratado de Libre Comercio (TTIP) que la Unión Europea negocia con EE.UU. y menor relevancia en términos geopolíticos a nivel mundial. Para la UE, la salida pondría en duda todo el proceso de integración de Europa y sentaría un precedente para otros países, aunque probablemente la mayor parte del coste de una salida lo sufriría el Reino Unido.