Boca perdió la magia y se convirtió en un equipo falible

Después de ocho triunfos en fila, dos derrotas seguidas transformaron al equipo de los mellizos Barros Schelotto en un dibujo de trazos groseros y desprolijos. Y, de esa manera, el campeonato recuperó emoción.

A Boca (24 puntos), que venía de una derrota como local, lo sorprendió Central (10), en Rosario, con un gol  tempranero de Marco Ruben. Pero ya venía acumulando golpes internos, por lesiones y suspensiones que fueron minando su poderío fecha tras fecha.

Hasta el Superclásico con River pudo disimular las heridas, pero el envión positivo se frenó. A favor: solo quedan dos jornadas para el receso de fin de año. En contra: resignó buena parte de la ventaja que había acumulado.

En el Gigante de Arroyito, Boca sufrió la expulsión de Paolo Goltz, la falta de creación en el medio y la poca potencia ofensiva que le quedó luego de la lesión de ligamentos cruzados del goleador del campeonato, Darío Benedetto. Como consuelo, le queda que el arquero Agustín Rossi mostró gran categoría cuando lo fusilaron a pelotazos los delanteros locales.

River (15) también llega al cierre del año con la lengua afuera, pidiendo un ingreso urgente en boxes para un ajuste de tuercas completo. En un mes recibió cachetazos de todos lados. Quedó afuera de la Copa Libertadores, perdió con Boca en el Monumental y el domingo volvió a caer, en Núñez, frente a Newell´s (9) por 3 a 1.

Sin jugar bien, se había puesto en ventaja con un lindo gol de Pity Martínez. Después, jugando muy mal, recibió tres impactos letales en menos de quince minutos. Para el equipo rosarino, la alegría fue efímera, porque pocas horas más tarde la AFA le quitó tres puntos por “inexactitud en la declaración jurada del pago de haberes de sus jugadores”.

Los que más sonrieron en el último fin de semana fueron San Lorenzo (21) e Independiente (18). El equipo que dirige el Pampa Biaggio juega mal, merece perder, pero gana y no le importa el qué dirán porque está segundo, a tres puntos de Boca. El sábado venció 1 a 0 a Argentinos (13) con un gol de Blandi, antes de los diez minutos, y el resto fue resistir y resistir.

Lo de Independiente fue mucho más placentero. Fue a jugar el clásico en la cancha de Racing (12), con mayoría de suplentes, algunos juveniles y pocas expectativas porque tenía toda la libido puesta en la semifinal de la Copa Sudamericana contra Libertad de Paraguay. Pero se llevó un triunfazo por 1 a 0, con gol de Leandro Fernández y estiró a 24 la ventaja en cantidad de triunfos entre los clubes de Avellaneda.

También Huracán (20) se imprimió una sonrisa enorme luego del triunfo por 2 a 0 frente a Chacarita (6), como visitante. Quedó a cuatro puntos de Boca y siguió solidificando una estructura ordenada y efectiva. Y la misma mueca feliz se vio en la ciudad de Santa Fe. Porque Unión (21) le ganó a Patronato (11), en Paraná, por 3 a 2 y comparte el segundo puesto con San Lorenzo; mientras que Colón (20) dio vuelta el partido que empezó perdiendo con Tigre (8), y lo liquidó por 3 a 1.

Además, en la fecha 10, Defensa y Justicia (15) venció a Banfield (15) por 1 a 0, como visitante; Belgrano (16) superó por 2 a 0 a Gimnasia (10), y Estudiantes (14) por 1 a 0 a Atlético Tucumán (13). El lunes se cerró la jornada con el muy buen triunfo de Talleres (18) por 1 a 0 contra Arsenal (5); el de Vélez (13) por 3 a 0 sobre Olimpo de Bahía Blanca (6), y el de Temperley (8) ante San Martín de San Juan (14) por 1 a 0.

Quedó pendiente Godoy Cruz-Lanús, porque el equipo que dirige Jorge Almirón está disputando la final de la Copa Libertadores  mañana miércoles 29 contra Gremio de Porto Alegre.

Foto Portada: Gentileza Departamento de Prensa de Boca Juniors.