La Beca 50 Best BBVA abre la cocina de Mugaritz a una estudiante taiwanesa
El restaurante Mugaritz celebra su 20° aniversario recibiendo a una invitada muy especial. El chef Andoni Luis Aduriz ha acogido en su cocina durante cinco semanas a la ganadora de la Beca 50 Best BBVA. La taiwanesa Jessie Liu ha aprovechado su estancia en el espacio gastronómico para empaparse de todo el saber hacer del equipo de Muguritz. Ahora completará su formación en el Atelier Crenn de San Francisco en la segunda parte de la beca.
Cuando Jessie Liu presentaba su candidatura a la Beca 50 Best BBVA no imaginó que pocos meses después se vería trabajando mano a mano con el equipo de uno de los mejores restaurantes del mundo. "Cuando me presenté a la beca pensé que no tenía muchas opciones. A medida que fui pasando fases fui ganando confianza, y me dije: tengo que conseguirlo”. Y así fue. Esta promesa de la cocina ha tenido la oportunidad de ampliar su formación con de uno de los mejores cocineros del mundo. Cinco semanas en las que ha absorbido como una esponja cada explicación de Andoni Luis Aduriz y su equipo.
Los días en San Sebastián han servido a Liu para confirmar su pasión por los fogones. "Cuando decidí dedicarme a esto mis padres no estaban a favor y fue complicado. Después de muchas dudas, voy a intentarlo con muchas ganas. Ahora sé que quiero dedicarme a esto toda la vida, ya no hay vuelta atrás, me he enamorado de esta profesión", confiesa.
Aduriz ha podido comprobar la implicación de Jessie y se muestra satisfecho con su paso por el restaurante. "Ella nos deja muchas cosas, yo creo que vino como se debe ir a una casa, con la mente abierta como para entender por qué hacemos lo que hacemos y cómo lo hacemos", afirma el chef donostiarra. Para Aduriz, la formación de jóvenes promesas de la cocina es esencial y por eso no dudó en poner a disposición de la Beca 50 Best BBVA su restaurante. "Más allá de crecer y de acumular conocimiento, es importante que todo eso se comparta", destaca.
Andoni Luis Aduriz, padre de la gran familia de Mugaritz
Por la cocina de Mugaritz, que este año celebra su vigésimo aniversario, han pasado más de 300 aprendices que hoy dirigen importantes proyectos gastronómicos. Aduriz comenta satisfecho el legado que está dejando: "En el futuro, más allá de que una empresa se pueda valorar por la cantidad de recursos que puede generar, quizás se pueda llegar a evaluar por la cantidad de conocimiento que es capaz de desplegar".
Andoni Luis Aduriz junto a Jessie Liu, ganadora de la primer Beca 50Best BBVA - BBVA
Jessie ya forma parte de ese legado y de esa familia que componen Aduriz y su equipo. "Las últimas cinco semanas en Mugaritz han sido muy intensas. Cada día he dado lo mejor de mí en la cocina. Aquí trabajamos duro y también nos divertimos. Es como una gran familia. Ha cumplido mis expectativas", señala Liu.
Más allá de las técnicas aprendidas y de los conocimientos adquiridos, la joven ha recibido de su mentor buenos consejos: "El otro día en la huerta del restaurante me contó cómo empezó todo, la historia que hay detrás del proyecto, sus experiencias personales y lo que espera de las generaciones más jóvenes de cocineros. Siempre es muy simpático, es como el padre de esta gran familia".
Ahora, Jessie viajará hasta San Francisco para comenzar la segunda parte de la beca. La de Taipéi cambiará los paisajes de Rentería por los fogones del prestigioso Atelier Crenn. "Quiero llegar como vine a Mugaritz, como una hoja en blanco, y absorber todo como una esponja", explica. La francesa Dominque Crenn, chef y propietaria del Atelier, es uno de los referentes de Jessie: "Siempre ha sido mi ídolo, una inspiración. Pude hablar con ella y es una persona increíble".
Jessie Liu, ganadora de la primera Beca 50 Best BBVA, en Mugaritz - BBVA
La idea de Jessie tras su experiencia en Mugaritz y Atelier Crenn pasa es volver a Taipéi. Pero por poco tiempo: "Tengo varios restaurantes en mente donde me gustaría trabajar, pero podría ser en cualquier parte del mundo. Tengo que ver qué pasa, pero me siento muy afortunada de haber tenido esta oportunidad increíble y seguro que en el futuro llegarán más cosas".
Jessie tiene claro que continuará aprendiendo y que es importante ganar toda la experiencia posible antes de abrir un proyecto propio. Eso mismo le ha aconsejado Aduriz: "Yo soy de una generación que no entró en una cocina sin formación. Entré después de hacer mis 5 años de escuela de cocina y para mí fue definitivo estar en un restaurante aprendiendo in situ, en la realidad. Es poco más o menos como hacer un máster para un profesional de la cocina". Además, añade que "es vital entender cómo es la realidad más allá de las teorías".
"Creo que para la gente que pasa por Mugaritz, en este caso Jessie, también es una oportunidad increíble porque ves, en un periodo corto de tiempo, el resumen o todo el conocimiento destilado. Esto es lo maravilloso de la formación: ser facilitadores del conocimiento para que ese conocimiento compartido siga creciendo". Oído, chef.