BBVA Research prevé que el PIB de Madrid crezca un 2,8% en 2019 y un 2,3% en 2020
BBVA Research estima que el crecimiento de la economía madrileña podría alcanzar un 2,8% en 2019 y un 2,3% en 2020. Así lo indica el Servicio de Estudios de BBVA en su último informe ‘Situación Madrid 1S19’, presentado hoy por el responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech, y Juan Carlos Hidalgo, director de la Territorial Centro de BBVA. De cumplirse estas previsiones, la región completaría cinco años con un crecimiento anual promedio del 3,0%. Asimismo, entre 2019 y 2020 se podrían crear 100.000 empleos netos, lo que llevaría a una reducción de la tasa de paro hasta el 10,8% promedio en 2020.
En 2018, el PIB regional habría aumentado un 3,1%, con un crecimiento en torno al 0,7% trimestral promedio CVEC, dos décimas por debajo del crecimiento trimestral registrado en 2017 y una décima por encima de la media nacional.
El mantenimiento del fuerte dinamismo de la economía madrileña se debe al empuje del consumo privado, al buen tono del turismo y a la aceleración del mercado laboral. El gasto de los hogares mantuvo estable su crecimiento a pesar de que los vientos de cola empezaron a perder vigor y la demanda embalsada se ha ido absorbiendo. Tanto la licitación de obra pública como la inversión en vivienda siguieron aumentando por encima del promedio nacional y el sector público impulsó tanto el gasto como la inversión, aunque cumpliendo el objetivo de déficit. Sin embargo, las exportaciones de bienes y el turismo se desaceleraron, aunque este último mantuvo un buen tono de crecimiento situando a Madrid como el más dinámico entre los tradicionales destinos turísticos.
El crecimiento se situará en el entorno del 2,5% en este bienio
En este contexto, las previsiones para el bienio 2019-2020 son favorables, aunque la tendencia en el horizonte de previsión, similar a la observada en el conjunto de España, es de una desaceleración moderada. Gradualmente, los apoyos que habían contribuido al elevado crecimiento en años anteriores van perdiendo potencia. Así, BBVA Research prevé que la economía madrileña crecerá un 2,8% en 2019 y un 2,3% en 2020.
En todo caso, diversos factores siguen contribuyendo al dinamismo de la economía de la Comunidad de Madrid. Por un lado, se espera que la recuperación de la demanda mundial continúe, a pesar del menor crecimiento en la eurozona, principal destino de las exportaciones regionales. Además, el abaratamiento del coste del petróleo y un euro algo más depreciado deberían apoyar el dinamismo de las ventas de bienes fuera de la eurozona.
Por otro lado, la normalización más lenta de lo previsto de la política monetaria apoyará la demanda interna y, en particular, al sector inmobiliario y a la inversión productiva. Asimismo, el impulso fiscal derivado del aumento de salarios públicos y de las pensiones, y del salario mínimo contribuirá a aumentar la renta disponible de los hogares y sostener el consumo a corto plazo.
Con todo, se mantiene la incertidumbre en diversos aspectos: en el entorno global, un aumento de tarifas aduaneras entre EE.UU., la UE y China es el riesgo más evidente, junto con un ajuste intenso del crecimiento en China y EE.UU. y un contexto europeo de mayor incertidumbre, ya que ha aumentado la probabilidad de una salida sin acuerdo entre el Reino Unido y la Unión Europea. El impacto directo podría ser limitado para el caso de la Comunidad de Madrid, dado el peso relativamente reducido de las exportaciones de bienes en la actividad regional, especialmente hacia el mercado británico. En todo caso, la posibilidad de un conflicto comercial mayor, junto con el efecto indirecto que pudiera tener un deterioro del entorno financiero relacionado a lo anterior, podría llevar a un escenario de menor crecimiento del comercio y de la economía mundial, en general, y europea, en particular.
A nivel doméstico, existen dudas sobre la política económica y la mayor incertidumbre derivada de la convocación de elecciones anticipadas. Un aumento de la fragmentación política podría condicionar las decisiones de política económica y territorial. Además, el ciclo político despierta dudas sobre la evolución del gasto público y el cumplimiento de los objetivos de déficit, tanto a nivel nacional como regional. Sin embargo el gobierno regional puede contar con una ventaja, ya que la información disponible indica que cerró el año 2018 cumpliendo con el objetivo de déficit, y además, es de los pocos que ha seguido accediendo a los mercados para financiar su deuda. Ello puede permitir, por tanto, una menor necesidad de ajustes contractivos en un momento de desaceleración cíclica.
Adicionalmente, el aumento del salario mínimo tendrá efectos negativos sobre el crecimiento y la creación de empleo a largo plazo, en la medida en que no venga acompañado de medidas que ayuden a mejorar la productividad. Además, se prevé una desaceleración del crecimiento del turismo, clave en la creación de empleo en España y en Madrid en esta fase expansiva.
100.000 nuevos empleos en Madrid en 2019 y 2020
De cumplirse el escenario planteado para la Comunidad de Madrid, la región podría crear 100 mil puestos de trabajo en 2019 y 2020, y reducir la tasa de paro promedio en 1,4 (puntos porcentuales) hasta el 10,8% a finales de 2020.
Según las previsiones del Servicio de Estudios de BBVA, este crecimiento permitirá aumentar los niveles de PIB per cápita en 1,7% promedio anual, en un contexto de incremento de la población.
En todo caso, los retos a medio plazo para la economía madrileña son exigentes: aunque se recuperará el nivel de empleo de 2008, la tasa de paro se encontrará aún casi 5 p.p. por encima. Más aún, el nivel de temporalidad ha aumentado a lo largo de 2018 y el elevado paro juvenil implica que la recuperación puede ser desigual y no inclusiva. Por tanto, se deben impulsar medidas que reduzcan la vulnerabilidad de la economía española y madrileña ante los desafíos vigentes.