BBVA Research: “Las Islas crearán cerca de 60.000 empleos hasta finales de 2018”
BBVA Research confirma que la recuperación de la economía canaria continuará tanto este año como el siguiente, ya que prevé un crecimiento del PIB del 3,5% en 2017 y del 2,8% en 2018. Así lo indica el servicio de estudios de BBVA en su último informe Situación Canarias, presentado hoy por Miguel Cardoso, economista jefe para España de BBVA Research, David Conde, director de la entidad bancaria en Canarias, y José Manuel Martín, director regional. BBVA Research estima que, en estos dos años, podrían crearse cerca de 60.000 empleos y se reduciría la tasa de paro hasta el 21,5% a finales de 2018.
El informe 'Situación Canarias' apunta a que la economía de la región avanzó a un ritmo del 3,5% durante 2016, 1,3 p.p. por encima de su media histórica. Esta recuperación está siendo más intensa de lo previsto hace unos meses, si bien también parte de un nivel más bajo, tras las últimas revisiones estadísticas del INE que redujeron 0,7 p.p. el crecimiento medio del periodo 2012-2015.
Miguel Cardoso, economista jefe para España de BBVA Research, David Conde, director territorial de BBVA en Canarias y José Manuel Martín, director regional, han presentado esta mañana el informe 'Situación Canarias'
En 2016, el vigor del crecimiento canario se explica tanto por el aumento de la demanda interna como externa. En particular, el consumo creció por encima de la media de España, sobre todo el privado. La inversión, tanto residencial como no residencial, mejoró, apoyada por las reformas de años anteriores y la reducción de los desequilibrios en el sector privado. Y, en el
ámbito de la demanda externa, se observaron récords históricos en las exportaciones de servicios turísticos, gracias a la aportación del turismo extranjero. Esto último, en parte, por la percepción de inseguridad en mercados competidores.
Por otro lado, el Gobierno de Canarias cumplió el objetivo del déficit con cierta holgura en 2016, y ello otorga cierto margen de maniobra para cumplir en 2017. La menor contención del crecimiento del gasto público, junto con la recuperación de la inversión en equipo y la mejora del sector residencial, compensarán la desaceleración esperada en el consumo privado y un turismo que, aunque seguirá creciendo, lo hará previsiblemente a un ritmo menor que en años anteriores.
Los datos disponibles en el inicio de 2017 apuntan hacia este mantenimiento del crecimiento en niveles elevados. En concreto, durante el primer trimestre del año se estima que el PIB canario pudo aumentar alrededor de un 0,9% en términos trimestrales, y los datos empleo del mes de abril anticipan que este comportamiento podría seguir en el segundo trimestre del año.
Además, la fortaleza del sector turístico permite que el crecimiento del empleo se mantenga por encima de la media española. Ello ha permitido que zonas turísticas como Fuerteventura y el Sur de Tenerife ya superen los niveles de afiliación pre-crisis.
En definitiva, se espera que el ritmo de crecimiento regional se sitúe en torno al 3,5% en el conjunto de 2017 y se desacelere hasta el 2,8% en 2018, en ambos casos por encima de las perspectivas para el conjunto de España (3,0% y 2,7%, respectivamente).
60.000 empleos en el bienio 2017-2018
Las previsiones de crecimiento del PIB soportan el dinamismo esperado en el mercado laboral de la región para el bienio 2017-2018, con la creación de 60.000 empleos y la reducción de la tasa de paro hasta el 21,5% a finales de 2018.
En todo caso, aún si se cumplen estas previsiones, en diciembre de 2018 la tasa de desempleo se situará todavía 7,2 puntos porcentuales por encima de su nivel a comienzos de 2008, y dado el aumento de la población insular, no se habrá recuperado el PIB per cápita.
Factores de riesgo
La revisión de las previsiones al alza se apoya en los buenos datos del arranque de año y en que algunos de los riesgos más directos no se están materializando. Con todo,los riesgos persisten, tanto a nivel externo como interno. En el extranjero, destacan las incertidumbres geopolíticas, con las dudas en torno a la política comercial de EE.UU y el impacto que posibles medidas proteccionistas puedan tener en la recuperación del comercio global. Además, hay dudas sobre las negociaciones para la salida de Reino Unido de la UE, tras la activación del artículo 50 del Tratado de Lisboa y los resultados de la futura cita electoral de 2017 en Alemania, o la retirada de los estímulos monetarios por parte del BCE.
En lo referente al turismo, factores como el encarecimiento del precio del petróleo o el agotamiento del impulso favorable del turismo extranjero “prestado por otros destinos”, como consecuencia de tensiones geopolíticas, pueden influir en la evolución del turismo en los próximos trimestres. Además, la debilidad de la libra esterlina y la gestión del brexit podrían afectar al turismo británico que llega a Canarias, que supone una cuarta parte de las pernoctaciones en la región, un tercio de las de extranjeros.
Por otra parte, la desaceleración de la demanda interna podría suponer también un riesgo en próximos trimestres, y aunque la incertidumbre sobre la política económica se ha moderado, podría seguir restando algunas décimas al crecimiento. En este aspecto, será clave la capacidad de generar consensos alrededor de las medidas para mejorar el funcionamiento de los mercados de bienes y servicios, con el fin de aumentar la velocidad del crecimiento y la creación de empleo.
En todo caso, la necesidad de continuar reduciendo los desequilibrios que aún conserva la economía canaria obliga a la consideración de nuevas reformas que ayuden a elevar el crecimiento de la productividad, mientras se mantiene el del empleo, se reduce la temporalidad y se consolida el desapalancamiento frente al resto del mundo.