BBVA Research: “Las economías de América Latina vivirán un punto de inflexión en 2017”
El ejercicio 2017 marcará un punto de inflexión para las economías de América Latina, con un crecimiento estimado del 1,3% para el conjunto de la región, frente a un decrecimiento del -1,3% en 2016. Así se desprende del informe Situación América Latina del cuarto trimestre publicado por BBVA Research. La recuperación será, no obstante, gradual y la región permanecerá todavía lejos de su crecimiento potencial, situado en torno al 3%.
El informe de BBVA Research destaca que las condiciones externas favorecieron tímidamente a América Latina, pero empezaron a revertirse a partir de noviembre, a partir de la elección presidencial en Estados Unidos, eliminando parte de las ganancias en los precios de los activos y en el tipo de cambio que se habían observado a lo largo del año hasta noviembre.
“En los últimos meses, ha habido una cierta mejoría de la actividad global, cuyo ritmo de crecimiento se está acelerando ligeramente por encima del 3% anualizado, con indicadores de confianza positivos y mejoras aparentes del comercio mundial”, explica Juan Ruiz, economista jefe para América del Sur de BBVA Research. “Sin embargo, las incertidumbres han aumentado relacionadas con las dudas sobre la política económica de la nueva administración en EE UU, lo que ha hecho que las tensiones financieras hayan aumentado fuertemente, sobre todo en las economías emergentes en general, y en América Latina en particular”, añade.
Repuntan los indicadores de confianza
Según destaca BBVA Research, los indicadores de confianza en la mayoría de los países han comenzado a mostrar una cierta recuperación, después de mantenerse en niveles deprimidos buena parte de los últimos dos o tres años.
BBVA Research ha trasladado ese punto de inflexión en los índices de confianza (y por ende, en el consumo y la inversión) a sus previsiones de crecimiento para la región. “Anticipamos que la mayoría de países de la región deberían mostrar un crecimiento mayor en 2017 que en este año. La excepción principal será México, donde la incertidumbre sobre las políticas económicas en EE UU tiene ya un impacto negativo significativo sobre la inversión y la actividad en economías muy vinculadas como la mexicana. De este modo, el promedio regional experimentará un crecimiento del 1,3% en 2017 frente al -1,3% en 2016, un crecimiento aún moderado respecto al potencial de la región –del 3%-, pero que quebrará la desaceleración regional iniciada en 2013”, señala Juan Ruiz.
No obstante, la región muestra heterogeneidad, con los países de la Alianza del Pacífico (Chile, Colombia, México y Perú) creciendo por encima de la media.
Inflación bajo control en América del Sur
En los últimos tres meses la inflación ha continuado moderándose en buena parte de las economías de la región, con la excepción de México y Paraguay, donde sin embargo se mantiene bajo control. “Esperamos que la inflación continúe disminuyendo en América del Sur, y que aumente gradualmente en México”, señala Juan Ruiz. En línea con esta dinámica, el experto de BBVA Research espera que continúen los recortes por parte de los bancos centrales en América del Sur, mientras que en México las próximas subidas serán incluso más intensas que las que se anticipan para la Reserva Federal de Estados Unidos.
BBVA Research observa que los riesgos para las economías de la región están sesgados a la baja. Los factores externos más relevantes son unas tasas de crecimiento global más débiles a lo esperado. “En EEUU, el panorama de las políticas económicas tras las elecciones se tiene que aclarar, para saber si llevará a un proceso de medidas que hagan frente a los riesgos de un crecimiento potencial menor en el largo plazo”, subraya el informe. “Pero más allá de ello, es importante que la estrategia de subidas de tipos de interés por parte de la Fed se haga de manera calibrada para no causar efectos colaterales en las economías emergentes, y en América Latina en particular”.
A medio plazo, los desequilibrios de la economía china no dan señales de disminuir y ello podría provocar ajustes bruscos.
En el terreno doméstico, aunque cada país es diferente, el informe destaca que la región sigue enfrentando los riesgos de un recrudecimiento del ruido político, una recaída de las confianzas o un retraso en los proyectos de inversión en infraestructuras.