Kim Chase
16 jun 2016
Últimamente, a la Fed parece que le cuesta aclararse, pasando de la euforia por las señales positivas de la economía al pesimismo más absoluto en cuestión de minutos. Al final, al público se le transmite un mensaje contradictorio sobre lo que está sucediendo, dando la impresión de que ni siquiera los miembros de la Fed saben cómo actuar en un entorno económico tan incierto.