Separación en origen: qué es y cuál es su impacto en el medioambiente
La separación en origen es parte fundamental de la economía circular, ya que impacta en la evolución hacia un planeta ambientalmente saludable. Como su nombre lo indica, consiste en la separación de residuos en el lugar y en el momento en los cuales se generan. Está directamente relacionado con las buenas prácticas en el hogar, pero también en las oficinas, los edificios, los comercios o las escuelas, entre otros espacios.
Según el Informe del Estado del Ambiente 2019 del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, en Argentina el promedio de generación diaria de residuos es de 1,15 kg por persona, lo que representa unas 49.300 toneladas diarias y alrededor de 18 millones de toneladas anuales.
La cantidad de residuos reciclados en el país alcanza alrededor de un 6%, según datos de Naciones Unidas. De separarse correctamente, más del 40% de los residuos podrían ser recuperados y reinsertados en el sistema productivo.
Lejos de ser sólo una cifra, estos datos visibilizan la importancia y el potencial de la separación en origen. Tomar conciencia y hacerlo en casa, en el trabajo o en la escuela beneficia a la economía circular, un sistema que aprovecha los recursos para reducir, reciclar y reutilizar lo que se desecha para darle una segunda vida. Los beneficios de hacerlo son de alto impacto en la lucha contra el cambio climático:
- Menor uso de materias primas: al reciclar vidrio, papel o plástico se necesitan menos recursos naturales para fabricar productos.
- Ahorro de energía: se utiliza menos energía necesaria para llevar a cabo los procesos de extracción, pero también de transporte y elaboración de las materias primas.
- Cuidado del medio ambiente: algunos elementos reciclables, como ciertos plásticos, pilas o baterías, tardan miles de años en degradarse. Tomarse unos minutos para ocuparse de su disposición evita que contaminen por muchos más años de los que la persona vivirá.
- Genera nuevos puestos de trabajo: el reciclaje genera nuevas oportunidades laborales para las personas que se encargan de gestionar los residuos y también para aquellas que producen nuevos objetos con ellos.
BBVA y su aporte a la gestión de residuos
Ayudar a los clientes en la transición hacia un futuro sostenible, con foco en el cambio climático y en el desarrollo social inclusivo y sostenible, es una de las seis prioridades estratégicas planteadas por BBVA.
Según el primer Reporte Integrado 2020 de BBVA en Argentina, las inversiones ambientales durante el año pasado alcanzaron un total de 25 millones de pesos. En la categoría residuos, parte de ese dinero fue destinado a la gestión de residuos peligrosos en áreas centrales, la adquisición de balanzas para pesaje en la Torre BBVA y la compra de contenedores para su separación.
Además, BBVA en Argentina se sumó en abril pasado a la Red de Economía Circular de la ciudad de Buenos Aires. Entre otros propósitos, el objetivo es generar acciones conjuntas para reducir la generación de residuos, aumentar la recuperación de los materiales y encontrar nuevos usos dentro de la industria.
Cada una de estas acciones se vincula a la visión global de la entidad financiera. En 2018, BBVA tomó el compromiso de alinear su cartera de crédito con los objetivos de calentamiento global del Acuerdo de París y de apoyar la necesidad de alcanzar cero emisiones netas de dióxido de carbono en 2050. De esta manera, la entidad avanza en los desafíos que enfrenta la sociedad en materia de cambio climático y sostenibilidad, y representa un impulso para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).