Clave 'token' y SMS: ¿cómo funcionan estos factores de autenticación?
Las claves 'token' y SMS son factores de seguridad que permiten a los clientes de BBVA en Argentina realizar completamente seguras sus transacciones y operaciones cotidianas.
La acelerada transformación digital como consecuencia del contexto COVID-19 se reflejó en un notable aumento de las operaciones que los clientes realizan a través de la Banca Online y Banca Móvil.
En este sentido, es muy importante conocer cómo prevenir los ciberdelitos y fraudes electrónicos. Actualmente, BBVA cuenta con dos claves que funcionan como segundo factor de autenticación que permiten confirmar la identidad de un usuario cuando realiza alguna operación a través de la 'app' BBVA Móvil o la Banca Online: la clave 'token' y la clave por SMS.
La clave 'token' es un código de seguridad con una serie de números que sirven para validar la identidad de la persona que está operando. Sirve, por ejemplo, para dar de alta a nuevos destinatarios, realizar transferencias y otras funcionalidades. Tiene la particularidad de cambiar cada 30 segundos y es válida por única vez y para una operación.
La clave por SMS es una medida adicional de seguridad que ayuda a proteger los datos y la seguridad de las cuentas. La clave SMS de BBVA permite autorizar diferentes operaciones y confirmar el cambio de algunos datos, la clave llega por SMS sin costo en el celular, no por medio de una 'app'.
Consejos para tener contraseñas seguras
Las contraseñas son la principal barrera de acceso a la información con la cual se topan los ciberdelincuentes. Por eso, deben ser fáciles de recordar, pero difíciles de 'hackear'. A continuación, explicamos qué se debe tener en cuenta para tener contraseñas seguras:
- No compartir con nadie las claves SMS y 'token'. Son personales e intransferibles. BBVA ni ninguna otra entidad solicitará estas claves por teléfono, correo, SMS o redes sociales.
- No acceder a ser guiado telefónicamente para realizar la vinculación de la clave 'token' en un cajero.
- Crear contraseñas fáciles de recordar y difíciles de adivinar. Es importante no incluir datos personales (nombre, apellido, fecha de nacimiento, etc.) al momento de crearlas.
- Cambiar las contraseñas periódicamente (al menos una vez al año).
- No anotar las contraseñas en cuadernos o post-its.
- Evitar utilizar contraseñas repetidas en los diferentes servicios y aplicaciones.