“América Latina está en un punto de inflexión”

En un coloquio sobre el impulso empresarial para retomar el crecimiento en Latinoamérica, José Manuel González-Páramo compartió su visión sobre las perspectivas de la región. En su opinión, 2016 aún será un año de ajuste regional, con una caída de la actividad del orden del -1,2%, que encadenará cinco años de desaceleración y tres de crecimiento por debajo de los países de la OCDE. La buena noticia, avanzó, es que la desaceleración regional tocará fondo en 2016 y empezará a crecer en 2017, probablemente cerca del 1,5%. “Por eso pensamos que estamos en un punto de inflexión en América Latina”, explicó.

Dos factores explican este cambio de tendencia, a su modo de ver: la mayor contribución del sector externo, beneficiado por las fuertes depreciaciones del tipo de cambio en los últimos dos años y el gradual aumento de precio de las principales materias primas de exportación; y el impulso de la inversión privada y los planes de inversión pública en infraestructuras en países como Argentina, Perú o Colombia.

“Son buenas noticias que nos hacen entrar bien en 2017, eso sí con una heterogeneidad grande entre países”, señaló. Los países que forman parte de la Alianza del Pacífico (México, Perú, Colombia y Chile) están creciendo ya a tasas de entre el 2% y el 2,5% en conjunto, con políticas moderadas y predecibles, comentó. Pero también empiezan a verse señales positivas en Brasil o Argentina.

José Manuel González-Páramo, que dirige el área de economía global, regulación y relaciones institucionales en BBVA, señaló que todavía es difícil valorar el impacto que tendrá en América Latina el cambio de gobierno en Estados Unidos. A su juicio, dependerá en parte de la postura de la nueva administración sobre los acuerdos comerciales. En este sentido, expresó su confianza en que valore que México es un mercado complementario en sectores clave para la economía estadounidense como el automotriz.

Un segundo factor que determinará el impacto en América Latina del resultado electoral en Estados Unidos será la reacción de los mercados financieros internacionales, en términos de volatilidad, aversión al riesgo y búsqueda de rentabilidad por parte de los inversores, explicó.

“Una buena noticia es que Latinoamérica está muy diversificada en comercio exterior”, apuntó. En las relaciones comerciales de la región, Estados Unidos pesa un 20%, Asia un un 30%, Europa un 15% y el comercio intrarregional, un 15%.

Por último, el consejero ejecutivo de BBVA miró al largo plazo y se refirió a las enormes oportunidades que supone la digitalización, que forma parte de la visión estratégica del banco, para potenciar la inclusión financiera en América Latina. En este sentido, explicó que el acceso a los servicios financieros tienen un efecto favorable directo en el bienestar de la gente, una cuestión clave para el crecimiento sostenible en las economías de América Latina. “Lo digital nos está sirviendo para romper barreras”, en referencia a la distancia física de poblaciones alejadas de las oficinas bancarias o los trámites burocráticos. “Y esto hace comercialmente viable la inclusión financiera”, dijo.

Lo digital nos está sirviendo para romper barreras

El Foro Latibex, organizado por Bolsas y Mercados Españoles (BME), en el Palacio de la Bolsa de Madrid,  reúne cada año a empresas latinoamericanas y europeas con presencia en América Latina, así como a expertos y analistas especializados, para compartir su visión de futuro sobre esta región.

José Manuel González-Páramo participó en la inauguración, junto al consejero delegado de la eléctrica brasileña Copel, Luiz Fernando Leone; el presidente y consejero delegado de Sacyr, Manuel Manrique; y el presidente de BME, Antonio Zoido.