Alquilar piso: cinco consejos para conseguirlo
Septiembre es el mes de la búsqueda de alquiler por excelencia. Estudiantes que empiezan el nuevo curso, familias que se cambian de ciudad o trabajadores noveles que se desplazan para incorporarse a su nuevo puesto: todos quieren un piso que cumpla sus expectativas. En este contexto, la búsqueda puede convertirse en una odisea si no se tienen claros los pasos a seguir.
El alquiler está ganando terreno en España. En 2016, un 16,3% de los hogares vivía en régimen de alquiler, casi un 3% más que diez años antes, según datos del INE. Además, un reciente estudio del portal inmobiliario Fotocasa afirma que el 30% de la población adulta se inclina por el alquiler frente a la compra y considera que la crisis favorece el crecimiento de este mercado. Esta tendencia provoca un gran crecimiento de la demanda, que se nota especialmente en ciudades como Madrid o Barcelona y en meses de alta actividad como septiembre.
En este contexto de alta demanda, buscar piso puede resultar una tarea prácticamente imposible. Por eso, es recomendable seguir ciertas pautas o pasos para encontrar una vivienda que se adecúe a las necesidades, presupuestos y expectativas de cada uno.
Tener unos objetivos claros
Antes de comenzar la búsqueda, es importante definir tres elementos básicos: presupuesto, ubicación y tipo de vivienda. Se empieza por calcular el presupuesto y, a partir de este, concretar la zona y tipología.
Una vez fijado el presupuesto, hay que decidir la ubicación (delimitar la zona dentro de la ciudad teniendo en cuenta distintos factores como el lugar de trabajo, las comunicaciones o las residencias de conocidos y familiares) y el tipo de vivienda (cuántas habitaciones y baños se necesitan, si el piso ha de ser exterior o interior, si ha de tener ascensor, etc.).
Aprovechar todos los métodos de búsqueda
Los portales inmobiliarios son en la actualidad el medio más utilizado para buscar vivienda por su amplia oferta y rapidez. Sin embargo, existen algunos medios de búsqueda tradicionales como los carteles en la calle o los porteros de los edificios que también pueden resultar útiles.
Además, es importante dedicar tiempo a buscar, hacerlo sin prisas e invirtiendo meses si fuera necesario. Para aquellos que no dispongan de tiempo, recurrir a una agencia puede ser una buena opción, siempre y cuando se esté dispuesto a pagar la comisión, que será normalmente de una mensualidad.
Realizar una visita exhaustiva
La primera impresión es fundamental, pero hay otros factores menos visibles de la vivienda que también hay que tener en cuenta cuando se realiza la visita. Así, es importante comprobar que tiene todos los electrodomésticos básicos, que las ventanas son de calidad y cierran adecuadamente, o con qué tipo de calefacción cuenta (de gas o eléctrica, individual o central).
Es también básico ser capaz de identificar los timos. Normalmente, las ofertas falsas siguen un mismo patrón: son anuncios con fotos y condiciones muy buenas que normalmente no se pueden visitar porque el dueño ‘se encuentra en el extranjero’ y pide un adelanto del alquiler. Por ello, es fundamental visitar el piso antes de firmar ningún contrato, por muy idílicas que parezcan las condiciones en el anuncio.
Además, una herramienta muy útil para calcular el precio orientativo del alquiler de la vivienda en la que se está interesado es BBVA Valora. Esta iniciativa permite obtener un valor real aproximado tanto de alquiler como de compra del piso escogido con tan solo introducir su dirección exacta.
No aceptar cualquier condición
Aunque la vivienda se adecúe a las condiciones definidas, hay algunos comportamientos que no se pueden aceptar bajo ningún concepto. Así, no debe aprobarse ningún contrato que no sea por escrito; no hay que acceder a pagar gastos que no correspondan al inquilino; no se debe pagar una fianza excesiva (La Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) estipula una fianza de una mensualidad en el arrendamiento de viviendas y de dos si el inmueble no se utiliza como vivienda); no hay que realizar ningún pago sin justificante ni firmar cláusulas perjudiciales de la actualización de la renta. Por último, no se debe entrar a vivir sin haber realizado un inventario previo donde se especifique el estado de muebles, electrodomésticos, suelos, paredes, ventanas y puertas.
Reservar lo antes posible
Cuando se encuentra una vivienda que cumple con todos los requisitos especificados, hay que reservarla cuanto antes. Es más, teniendo en cuenta que existe una alta demanda y que los propietarios y agentes inmobiliarios enseñan los pisos sin comprometerse con nadie, los expertos recomiendan acudir a la visita con el dinero necesario para la reserva (una mensualidad) y con toda la documentación que pueda ser requerida (contrato de trabajo, últimas nóminas, etc.).