Ahorro en la vuelta al cole: una misión no tan imposible
¡Llega la vuelta al cole! Entre todos los gastos previos que hay que hacer, la partida dedicada a los libros y el material escolar suele ser la que da más quebraderos de cabeza. Sin embargo, aunque parezca imposible, hay maneras de ahorrar de cara a septiembre.
La lista parece interminable: uniformes, libros, mochilas, cuadernos, pinturas… Es fácil agobiarse ante todo lo que hay que comprar para que los niños vayan bien equipados al colegio, pero hay maneras de superar este trance y, además, hacerlo con nota. En estos casos, la mejor arma del ahorrador es comprar gran parte del material por adelantado ya que puede suponer una gran diferencia, pero si no ha sido posible, hay formas de solucionarlo.
Si no puedes comprar, alquila
No siempre es necesario comprar los libros de texto, siempre está la opción de pedirlos prestados a familiares y amigos cuyos hijos ya hayan pasado a otro curso.
Si no es posible, conviene informarse en el centro escolar o en la Asociación de Padres de Alumnos por si cuentan con algún programa de depósito de libros de texto. Y si esta vía tampoco es accesible, internet acude al rescate con plataformas que permiten adquirir libros de segunda mano, como La Casa del Libro, o incluso, alquilarlos como en Google Play Books y Amazon.
Se pueden desgravar
Muchas veces se olvida que los gastos en libros, uniformes o material escolar pueden tener deducciones, aunque estas dependerán de la política fiscal de cada país. Por eso, conviene informarse previamente sobre las ventajas fiscales según el lugar en el que se viva.
En todos los casos, hay que guardar a buen recaudo las facturas de cada compra, mejor que los tickets, para que se vean claramente los materiales que se han adquirido y poder demostrar cada gasto.
Mantenerse firme
Llega la hora de comprar y a los niños les gusta todo. Para evitar compras impulsivas, lo mejor, como siempre, es haber hecho un presupuesto previo que sea realista y atenerse exclusivamente a él, sin hacer caso de las peticiones de los pequeños. En el caso de los libros de texto, que suponen un gran desembolso, la OCU recuerda que es posible ahorrar hasta un 25% del coste según el sitio donde se compren. En las grandes superficies, los precios suelen ser más ajustados.
Acudir a internet
Si no se quiere alargar más de la cuenta el trance de salir de compras con los niños, hacerlas online puede ser una buena solución. Internet no solo permite comparar precios con comodidad y localizar descuentos y ofertas. También es un gran escaparate de productos de segunda mano con ahorros, en algunos casos, de hasta el 60 y el 70%.
Antes de poner en marcha estos consejos, una última recomendación. Empezar un nuevo curso no tiene por qué significar estrenarlo todo. Si hay algo que se puede seguir usando, como la mochila, el estuche o algunas prendas de ropa, ¿por qué no hacerlo? A la larga, supondrá un ahorro considerable y la mejor forma de inculcar a los hijos una manera de consumir más responsable y sostenible.
Para mantenerse al día, en el Centro para la Educación y Capacidades Financieras se encuentra disponible toda la información relevante sobre educación financiera en el mundo.